PURÉ BLANCO, PUDÍN NEGRO, MANZANAS

 

Ingredientes para una porción

 

300 g de apio (raíz de apio)

1 papa pequeña

½ manzana tipo Fuji (que "sostiene" el mejor cocinero en la sartén ...)

1 rebanada (80 g) de morcilla

10 gramos de mantequilla

2 cucharadas soperas de crema sencilla

 

Pelar el apio y cortarlo en cubitos de 1 cm por 1 cm. (Si tienes que cortar un avellano entero, tienes un tazón con agua de limón listo en el que empapar las piezas para evitar que se va negro antes de cocinar.)

 

Pelar la papa y cortarla en cubos de 1 cm por 1 cm.

 

Coloque el avellano y la papa en la canasta de vapor de su Babycook®.

Poner agua en el tanque (nivel 3) e iniciar la cocción.

Pelar la manzana y cortar en cuñas gruesas. En una sartén a fuego lento, añadir 5 g de mantequilla, luego las manzanas. Cocínalos girándolos suavemente pero evite aplastarlos.

 

Una vez que el apio y la papa estén cocidos, mezclarlos en el Babycook® incorporando la mantequilla restante y la crema.

 

En una sartén antiadherente caliente, sazone la "rebanada" de morcilla y cocínela a fuego alto por 2 minutos a cada lado.

 

Servir inmediatamente con el puré de avellanas y patatas y las manzanas caramelizadas.

 

Para la nutrición consciente

En esta receta, morcilla está en el centro de atención. Durante el embarazo, la mujer embarazada tiene una necesidad especial de hierro, lo que le impide volverse anémica y le permite al bebé hacer la sangre que necesita.

El pudín negro es muy rico en hierro porque contiene 13 mg de hierro para 100 g de budín, que es casi la ingesta diaria recomendada. El hierro de origen animal es mejor absorbido que el de origen vegetal (de lentejas, por ejemplo). Si tienes un verdadero disgusto por el morcilla, el hierro de un animal se encuentra en la carne roja, por ejemplo, una hamburguesa, carne, carne asada, cordero, oveja ..., en cualquier caso el morcilla es un alimento que se come dos veces máximo mes, dada su riqueza en grasa.

 

Como sustituto de los intolerantes a la lactosa

 

En este caso, mezcle finamente la papa y el apio y añada una cucharadita de aceite de oliva para que el contenido sea más suave.

 

Para caramelizar las manzanas, elija una margarina de vegetales, permitiendo que la manzana brille, sin la adición de lactosa contenida en la mantequilla.